Bildu se deshace en elogios al padre de Pablo Iglesias militante de la banda terrorista FRAP

La formación proetarra Bildu se ha deshecho en elogios a Javier Iglesias Peláez, padre de Pablo Iglesias y antiguo militante del FRAP, después de que la portavoz parlamentaria del PP, Cayetana Álvarez de Toledo, le respondiera que él es «hijo de un terrorista» a su ataque machista de tratar de desprestigiarla como «señora marquesa» procedente de la aristocracia.

En una comparecencia este jueves de Iglesias en la Comisión de Reconstrucción Social y Económica del coronavirus en el Congreso, la portavoz de Bildu, Mertxe Aizpurua, ha enfatizado «el respeto de nuestro grupo a personas que como su padre se atrevieron a confrontar contra una dictadura franquista que se llevó por delante la libertad de nuestro pueblo y de los pueblos del Estado español durante 40 años».

En su turno de respuesta, el vicepresidente segundo y ministro de Derechos Sociales y Agenda 2030 se ha dirigido a la portavoz de la marca política de los herederos de la banda terrorista ETA tras la alusión de Aizpurua a su padre. «Muchísimas gracias por su solidaridad», le ha contestado Iglesias a Aizpurua después de que ensalzara la figura de su padre.

En el Pleno celebrado este miércoles, Álvarez de Toledo retrató a Iglesias como el «embajador de ETA en el Gobierno, el burro de Troya de la Democracia», aludiendo así a las conexiones del vicepresidente con la formación proetarra Bildu, con la que el Gobierno pactó la semana pasada la derogación íntegra de la reforma laboral impulsada por el PP para tener su abstención (no era necesaria) en la quinta prórroga del estado de alarma.

«Censura»

«Se lo diré por primera y última vez , usted es el hijo de un terrorista, usted pertenece a la aristocracia del crimen», enfatizó Cayetana desde la tribuna de oradores. Tras ello, la presidenta del Congreso de los Diputados, la socialista Meritxell Batet, instó a Álvarez de Toledo a retirar la frase «hijo de un terrorista», algo a lo que se negó la portavoz del Grupo Popular subrayando que el padre de Iglesias fue «militante del FRAP», como el propio vicepresidente reconoció en un artículo de prensa.

Pese a esta negativa, Batet dio orden de que se retiren tales palabras del Diario de Sesiones, un hecho que provocó también una bronca en la Mesa del Congreso. El vicepresidente cuarto y diputado de Vox, Ignacio Gil Lázaro, denunció que se borraran tales alusiones. Mientras que la bancada popular calificó este hecho de «censura».

Tras la polémica Álvarez de Toledo se hizo eco en su cuenta de Twitter de los mensajes de la abogada de la AVT Carmen Ladrón de Guevara en los que señaló las cinco víctimas mortales atribuidas al FRAP.

La lista de asesinados por el FRAP es la siguiente:

1. Juan Antonio Fernández Gutiérrez. 1 de mayo de 1973. Madrid. Subinspector del Cuerpo General de Policía

2. Manuel Pedregal Manzano. 1 de mayo de 1973. Madrid. Subinspector del Cuerpo General de Policía

3. Lucio Rodríguez Martín. 14 de julio de 1975. Madrid. Policía Armada.

4. Antonio Pose Rodríguez. 16 de agosto de 1975. Madrid. Teniente de la Guardia Civil de tráfico

5. Juan Ruiz Muñoz. 14 de septiembre de 1975. Barcelona. Policía Armada.

En concreto, el Frente Revolucionario Antifascista y Patriota (FRAP) era una organización con una orientación ideológica «antifascista» que fue considerada como una organización terrorista. Fue creada en el año 1973, aunque gestada dos años antes, por el Partido Comunista de España en colaboración con Julio Álvarez y la Unión Socialista de España.

El grupo usó la violencia contra la dictadura de Franco con el propósito de crear un movimiento popular en España e instaurar una República en el país. Los integrantes del FRAP asesinaron en atentados terroristas a los citados integrantes de las fuerzas de seguridad. El Frente Revolucionario Antifascista y Patriota se disolvió en el año 1978 por orden del Partido Comunista de España (m-I).

Bono y Peces-Barba, abogados

El propio Iglesias Peláez narró en su blog (donde incluyó sus intervenciones en la cadena Ser) que «cuando se produjo la segunda de mis detenciones, allá por el lejano año 1973, me vinieron a ver a la cárcel por el locutorio de abogados nada menos que don Enrique Tierno Galván, don Gregorio Peces Barba y el que entonces era un oscuro pasante del despacho de Tierno», en alusión al ex ministro de Defensa y ex presidente del Gobierno, José Bono.  El padre del líder de Podemos estuvo encarcelado aquel año por «repartir de propaganda anifranquista», según la formación morada.

Iglesias Peláez explicó así aquella visita: «No es que yo tuviera ninguna importancia, ni a los 19 años ni ahora. Pero, aparte de la solidaridad que el acto implicaba, sucedía que por aquel entonces el PSOE andaba muy dividido entre históricos, renovados y socialistas del interior, y resultaba que mi padre, viejo socialista de toda su vida, con una condena a muerte y cinco años de cárcel, resultaba especialmente atrayente por su condición confesada de católico practicante y de socialista de abolengo». El abuelo de Pablo Iglesias, Manuel Iglesias, falleció en 1986.